lunes, 31 de diciembre de 2007

Qué felicidad terminar el año metiéndola

Pues sí, este año va a terminar a lo grande. La he metido por última vez este año a las 20:49 horas.

Y la verdad es que ha costado. Parece muy fácil, durante todo el año no ha sido demasiado complicado. No voy a ser chulo ni quiero dar envidia a nadie, la verdat, pero lo de conseguir meterla no se me suele dar muy mal.

Como ya he contado, a las 20:49 horas, tras beber más de tres botellas de vino espumoso de la tierra(no tengo nada en contra del cava ni del champán pero los vinos espumosos de Castilla y León también están buenos) lo conseguí. Sé que ya había mucho alcohol, que así es más fácil pero no hay que quitar el mérito, yo he sido el que ha metido el último gol al futbolín del año. Así, tal cual.

Hoy ha sido de esas tardes en las que he perdido muy pocas partidas y claro, quería tener el honor de ser el que ha metido el último gol del año y lo he conseguido :D

Querría felicitaros el año nuevo a todos ahora que quedan dos horitas para terminar el 2007.

¡¡¡Feliz 2008!!!


Para terminar os dejo con una canción de año nuevo:



Que el 2008 os traiga un montón de cosas buenas a todos.

lunes, 24 de diciembre de 2007

Villancico

Que se note que es Navidad, para todos vosotros un ¿villancico? Bueno... ¡eh! ¡eh! La oveja...






Que Jesusito nació hoy... o en verano según los estudiosos pero bueno, feliz Navidad :)

sábado, 22 de diciembre de 2007

La frase de la mañana del 22 de diciembre

Toooooodo el sorteo de la lotería de Navidad se reduce a la siguiente frase:

- ¿Que ya ha salido el gordo? ¿Y en qué acaba?


El número en sí no interesa, total, si te ha tocado el gordo ya te enterarás.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Las propinas

Ahora resulta que los comerciantesy hosteleros se quejan de que la gente no deja propina, o, por lo menos, lo que ellos consideran suficiente.

Genial, somos un atajo de desconsideramos que no tenemos el más mínimo decoro con el personal que se dedica al sector servicios. Esas mismas personas que, por ejemplo, nos subieron un café de 100 pesetas a un euro de golpe sin otra justificación que el poderse lucrar a costa nuestra ahora están diciendo por la televisión y los periódicos que no les dejamos dinero suficiente de propina.

Comentarios como: "Antes, cuando repartía flores y llegaba San Valentín me podía ganar perfectamente más de un sueldo en propinas pero ahora mismo no me saco más que un tercio de lo de antes" (Cálculos mentales: 10 días de trabajo en uno, no está nada mal). Yo comprendo que haya gente que tenga un sueldo tan bajo que las propinas sean un modo de ganar un sobresueldo pero leches, que no sólo se quejan los mindundis, que también se quejas los dueños de los bares.

Yo creo que si debemos dar, por ejemplo, X dinero a un camarero que nos pone una comida en un restaurante también deberíamos dárselo a la cajera del Día que nos está pasando todos nuestros artículos, ya sea un paquete de pan de molde o un detergente de 5 litros. Pero a ellas no se las deja(o se las deja muy poco porque no creo que el "Quédate con el céntimo" se pueda considerar propina.

A mí tampoco me dan propina por hacer mi trabajo. Nadie dice, "Ei, pues esta web está de vicio y me resulta mazo de útil, voy a dar una propina a sus creadores". O los cliente, "Qué bien habéis currado, vamos a pagaros 50€ a cada integrante del grupo como compensación a la labor bien hecha". Todo lo contrario, si pueden ahorrarse dinero lo harán.

Am, y sí, sé que fuera de aquí, en muchos países es más una obligación que la voluntad y está hasta estandarizado lo que hay que dejar.

domingo, 9 de diciembre de 2007

Adicto a los polvorones

Hola, soy Kiosuke y me confieso adicto a los polvorones. Vale, no a cualquier polvorón, soy adicto a los polvorones El toro vega.

Paso al lado del mueble y me vienen a la mente. Tengo que echar un vistazo. Están ahí. Míralos. Qué ricos ellos, ni se mueven. Voy a abrir la bolsa...

¿Dos o tres? Bueno, empieza por dos así luego tienes motivo para volver y coger otros ¿dos o tres? Venga, que me como el primero...

Y lo coloco sobre la palma de mi mano preparándome para aplastarlo. Sí, me encanta aplastarlos. Nada de comerlos tal cual vienen, se perdería la gracia. Coloco la otra mano sobre él y ejerzo fuerza. Y más fuerza, por si acaso...

Lo desenvuelvo y por fin empiezo a comerlo.

Mal. Has caído otra vez. Qué va a ser de ti. Cómo se lo dirás a tus amigos. No se puede, es algo que se lleva por dentro y por fin hoy me he animado a contarlo que dicen que es el primer paso... Pero no quiero que se termine, quiero seguir siendo adicto, pero eso sí, adicto aceptado.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Adios, mi antena

Te disfruté mientras no me enteraba;
Caminos enteros iban pasando
cuando conducía casi volando
y el mundo en mi travesía pasaba.

Una triste noche aparqué, confiado,
sin saber que sin ti me quedaría
y cuando llegué, con toda alegría
me asombré, con el robo allí pasado.

Eras mi antena, mi gran energía,
mi compañera, mi gran escudera,
el detalle que todo lo decía.

Todos me aconsejan que ladrón fuera,
que más vivaz y feliz yo sería
si otra antena, rápido, yo cogiera.