Vuelta de vacaciones

Pues ya he vuelto de mi ruta vacacional y no podría estar más cansado. ¿Quién demonios ha inventado las vacaciones cansadas...? Bueno, cómo no van a existir vacaciones cansadas si existen trabajos descansados, o sea, ser funcionario. En fin, por partes.

Mi primer día de vacaciones lo dediqué a ir a Madrid a ver el concierto de Bruce Springsteen. Madredelamorhermoso, ¡qué pedazo de concierto! El tío es el Boss porque se lo merece, tres horazas de concierto sin descanso. Podría decir que he visto el concierto de mi vida si no fuera porque no tenía entradas de cesped y me tocó verlo desde las gradas del Bernabeu. Cómo explicarlo... es como estar allí pero sin estarlo, como tener un viaje astral y verlo todo desde encima, como comer el chupachups más rico del mundo pero al desenvolverlo ver que el caramelo se ha desprendido del palo. Conclusión, cuando vuelva iré a verlo de nuevo y con más ganas todavía.

Segundo destino, Santiago de la Ribera (Murcia). Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que Madrid está de camino a Murcia mi coche medio cochambroso y averiado me pedía partir de allí y no pasar ningún día en Valladolid para hacer los menores kilómetros posibles (el precio del carburante y los peajes también ayudan en estas decisiones). Una semanita entre Murcia y Alicante es de lo mejor para desconectar y disfrutar de mar, los helados y las horchatas. Por la máñana Mar Menor (o piscina sin bordes para saltar de cabeza) y por la tarde mar Mediterráneo para disfrutar un poco de las olas(normalmente en las playas de Pilar de la Horadada). En fin, tocada de güebos a dos manos, para qué contar más.

Última parada, Cuenca. Cuatro magníficos días en medio de la naturaleza en un marco incomparable como es Cuenca. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, que desde Murcia( ¡Qué hermosa eres!) y que tengo unos amigos funcionarios allí la visita era casi obligada. La ciudad se la recomiendo a todo el mundo ahora bien, hay que saber una cosa antes de ir, las cuestas que hay allí son dignísimas de subir con piolet. A parte de visitar el casco antiguo (patrimonio de la humanidad) hicimos un par de excursiones ver hoces de ríos (a parte de las dos del Hueccar y Júcar que delimitan la ciudad) y las Torcas y Lagunas que había por allí cerca. ¡Qué cansacio! Por cierto, salir allí de tapas es obligado también, medio litro de cerveza cuesta entre los 2 y 2,5 euretes acompañados de varias tapas de las que te dejan con la boca abierta. Si antes pensaba que ser funcionario era lo segundo mejor del mundo después de ser rico, vengo pensándolo todavía con mayor convicción.

En fin, ahora tengo unos días para descansar de las vacaciones y mentalizarme de que tengo que volver al curro en unos días.

¡Un saludo a todos!